En la actual escena del indie pop de Francia pululan muchos dúos genéricamente mixtos, es decir abundan las bandas integradas por un hombre y una mujer (Cocoon, The Dø, John & Jehn, etc). Sin embargo, la gran mayoría de éstas se caracterizan por elegir cantar en inglés antes que en francés. Holden, afortunadamente, no sigue esa tendencia.
Si bien es cierto que el dúo formado por Armelle Pioline y Mocke se inició en Dublín cantando en el idioma de Oscar Wilde, al cabo de un tiempo –estimulados, según han declarado, por el reconocimiento que el disco La Fossette (aquel que incluye la ya clásica “Le courage des oiseaux”) de Dominique A comenzaba a cosechar– decidieron empezar a expresarse de otro modo.
Así, tras casi 15 años de trabajo, revisar la producción musical de Holden es una tarea sumamente interesante. Los gustos de sus integrantes son fácilmente intuibles: Billie Holliday, The Velvet Underground, The Byrds, J. P. Nataf, Yann Tiersen y Jean-Louis Murat son los primeros artistas que a uno se le vienen a la mente. Pero es en las letras donde más se destacan, ya que sus canciones son como pequeños cortometrajes construidos de acuerdo a un montaje que no necesariamente respeta la linealidad. De esa manera sus títulos apuntan a explorar aquello impalpable, aquello que pertenece más bien al orden de la sensación o de la vivencia interior. La voz acariciante de Pioline contribuye considerablemente en esa labor.
Holden tiene una curiosa relación con Chile, país al que han visitado en varias oportunidades y en el que han grabado su disco Chevrotine en 2006 de la mano de un productor local. Por ello es posible hallar también referencias a Roberto Bolaño o a Violeta Parra entre su obra.
Su más reciente producción se titula “L’Essentiel”, y es un álbum que –como su nombre lo indica– reúne lo más reconocido del grupo. L’Essentiel es doble: en su lado A se escuchan las piezas más populares (“Madrid”, “C'est plus pareil”, “Sur le pavé”, etc) que reconstruyen su aventurera trayectoria musical, mientras que su lado B está reservado para cederle espacio a un montón de canciones inéditas (canciones que en su momento funcionaron como bandas sonoras de diversas películas -como “1001 femmes” o “Bob”-, o covers como “The Boy with the thorn in his side” y otros trabajos de su época en la que aún no cantaban en francés).
L’Essentiel no es pretencioso. Al contrario, L’Essentiel es una obra ideal para que cualquiera que ignora lo que es Holden pueda por fin descubrirlo.
Video:
Si bien es cierto que el dúo formado por Armelle Pioline y Mocke se inició en Dublín cantando en el idioma de Oscar Wilde, al cabo de un tiempo –estimulados, según han declarado, por el reconocimiento que el disco La Fossette (aquel que incluye la ya clásica “Le courage des oiseaux”) de Dominique A comenzaba a cosechar– decidieron empezar a expresarse de otro modo.
Holden tiene una curiosa relación con Chile, país al que han visitado en varias oportunidades y en el que han grabado su disco Chevrotine en 2006 de la mano de un productor local. Por ello es posible hallar también referencias a Roberto Bolaño o a Violeta Parra entre su obra.
Su más reciente producción se titula “L’Essentiel”, y es un álbum que –como su nombre lo indica– reúne lo más reconocido del grupo. L’Essentiel es doble: en su lado A se escuchan las piezas más populares (“Madrid”, “C'est plus pareil”, “Sur le pavé”, etc) que reconstruyen su aventurera trayectoria musical, mientras que su lado B está reservado para cederle espacio a un montón de canciones inéditas (canciones que en su momento funcionaron como bandas sonoras de diversas películas -como “1001 femmes” o “Bob”-, o covers como “The Boy with the thorn in his side” y otros trabajos de su época en la que aún no cantaban en francés).
L’Essentiel no es pretencioso. Al contrario, L’Essentiel es una obra ideal para que cualquiera que ignora lo que es Holden pueda por fin descubrirlo.
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