“L’essentiel est
invisible pour les yeux”
Le Petit Prince
Hay muchas maneras de hacer una
lista. La que sigue a continuación no pretende reunir los títulos de las
películas más taquilleras, ni de las películas más premiadas, ni de las
películas más aprobadas por los críticos, y ni siquiera de las 21 películas de
mayor calidad realizadas en Francia entre 2000 y 2014. Lo que intento hacer con
esta lista es combinar todos esos criterios para seleccionar 21 películas que
representen lo esencial de la cinemateca francesa del siglo 21. Es decir, más
allá de que las películas sean buenas o malas, o que hayan sido aclamadas en
todo el mundo o sólo en el Hexágono, o que hayan movilizado masivamente a la
gente hacia los cines o sólo hayan conseguido vender un puñado de entradas, lo
que a mi me interesa es identificar a esas obras que han penetrado en el
imaginario cultural francés y hoy son parte de la memoria colectiva de Francia.
21. Astérix et Obélix : Mission Cléopâtre (2002)
La segunda película de la saga de
los famosos héroes caricaturescos Asterix y Obelix los pone esta vez a buscar
aventuras en el Antiguo Egipto. Lo que tiene esta obra es que el humor proviene
de una serie de chistes en francés y pequeñas parodias distribuidas a lo largo
de la cinta (hay alusiones a Star Wars,
Matrix, Titanic, Cyrano de Bergerac, Benny Hill, etc). Es como un episodio
de The Simpsons.
The Artist (y no L’Artiste)
es un pastiche que homenajea al cine clásico de Hollywood, aquel que no
precisaba del color para ser una fábrica de ilusiones. Filmada como una pieza
de cine mudo, la obra fue promocionada internacionalmente ocultando su origen
francés, lo que le permitió ganar el Oscar a la Mejor Película del año. Ello
generó cierta incomodidad entre los franceses, pero no evitó que se
vanagloriaran de haberles dado una lección de nostalgia y cinematografía a los
EEUU.
19. La vie d’Adèle (2013)
Una historia de amor sáfico
adolescente, con fuertes escenas de sexo incluidas, cuyo mayor logro fue haber
obtenido la Palma
de Oro en el Festival de Cannes. La película emergió justo cuando en Francia se
discutía acaloradamente acerca de la conveniencia de legalizar los matrimonios
entre personas homosexuales, y a raíz de ello se convirtió en una especie de
estandarte del elegebetismo galo.
Cuando Yves Saint Laurent murió
en 2008, los franceses supieron que el diseñador de indumentaria había
ingresado al panteón donde moran los restos de los héroes culturales del
Hexágono. Por tanto era cuestión de tiempo para que adquiriese una especie de
estatuto mítico que lo tornase invulnerable a las críticas. Saint Laurent, dirigida por Bertrand
Bonello, es una biopic que muestra los momentos más sórdidos y decadentes del
querido Yves, junto a reproducciones de la magia que supo fabricar. Al no ser
hagiográfica, la obra agiganta el mito de Saint Laurent mucho más que
cualquiera otra obra que lo tenga por protagonista.
Una comedia multiculturalista, en
la que un par de franceses católicos y blancos aprenden a convivir en armonía
con gente de otras razas y religiones. La película, más allá del mensaje
positivo, explota un humor tan políticamente incorrecto, que los
estadounidenses se negaron a difundirla en sus cines por considerarla más
ofensiva que divertida.
Otra comedia que se ríe de los estereotipos:
en este caso un habitante del sur de Francia es transferido hacia el norte por
el organismo para el cual trabaja. Deprimido porque creía que iba a mudarse a
un lugar tosco y rústico, descubre en cambio que en esa parte del país habitan
personas encantadoras, y termina luego consiguiendo su complicidad para
embaucar a su esposa. Es una suerte de oda a la Francia de alma sencilla y
libre de pretensiones extravagantes, la misma que aparenta sobrevivir entre los
pueblitos de provincia.
15. Un long dimanche de fiançailles (2004)
La cinematografía francesa
produjo en el siglo 21 varias películas ambientadas durante la Primera Guerra Mundial (La chambre des officiers, Joyeux Noël, etc.), pero Un long dimanche de fiançailles es
especial debido a que, oficialmente, no es considerada francesa. Sucede que la Warner Bros. invirtió una buena
cantidad en el desarrollo de la obra –una historia de amor protagonizada por
Audrey Tautou–, lo que hizo que el gobierno de Francia se negara a subsidiarla,
pese a que los franceses mantuvieron el control creativo y se responsabilizaron
por la presentación final de la película.
14. Welcome (2009)
Un alegato a favor del humanismo.
El argumento es así: un joven kurdo, que vive ilegalmente en Calais, quiere
llegar a Inglaterra para reunirse con su novia; sin embargo el viaje no es tan
sencillo para él, dada su condición de habitante irregular en Europa; por ello
decide tomar clases de natación con un instructor francés, con la intención de
cruzar a nado el Canal de la Mancha ,
una tarea más bien complicada incluso hasta para los nadadores experimentados.
La película sirvió para disparar la discusión sobre las leyes que
criminalizaban la asistencia a inmigrantes ilegales que regían sobre Francia.
13. La môme (2007)
Conocida internacionalmente como
“La vie en rose” (el título “La môme” es un nombre demasiado
francés para referirse a Édith Piaf), la película convirtió a la actriz Marion
Cotillard en una megaestrella del cine internacional. La intensidad con la que
interpreta sus escenas es abrumadora. El homenaje a la desdichada Piaf es
bastante respetuoso, pese a que la película intenta deliberadamente ser un
producto de consumo masivo.
12. Les triplettes de
Belleville (2003)
Una obra de animación en la que
una heroína inverosímil debe rescatar a un ciclista campeón de las garras de la
mafia. La película es obsesivamente detallista, llena de toques surrealistas y
referencias paródicas y satíricas hacia el universo de Disney. Ideal para
padres que quieren que sus hijos crezcan de alguna manera desintoxicados de la
influencia de Hollywood (y desconectados del resto del rebaño).
11. Intouchables (2011)
Un francés adinerado y paralítico
decide hacerle un favor a un negro desempleado: básicamente ese es el argumento
de esta película. La relación entre el benefactor y su simpático ayudante crece
hasta convertirse en una verdadera amistad. Al final el negro descubre lo
maravilloso que es vivir asimilado en Francia.
10. La guerre est déclarée (2011)
Muchas películas se basan en la
reconstrucción de hechos reales, pero es un tanto inusual que además estén
protagonizadas por las propias personas que vivenciaron esos hechos. En La guerre est déclarée los actores
Valérie Donzelli y Jérémie Elkaïm recrean el drama que vivieron cuando se
enteraron que su hijo de 18 meses de edad tenía un tumor en el cerebro. Una
película intensa pero no voyeurista, que habla sobre la alegría de vivir.
9. Le goût des autres (2000)
Seis personajes que provienen de
distintos estratos sociales entrecruzan sus vidas cuando un empresario empieza
a tomar clases de inglés con una actriz. Una película inteligente y emotiva.
8. Un conte de Noël (2008)
Una buena historia sobre las tensiones familiares.
7. Être et avoir (2002)
Los documentales suelen tener una
voz en off que hilan la narración y desarrollan una idea. A Être et avoir esa voz externa no le hace
falta: en una escuelita rural de la campiña francesa, un maestro, con sobrada
paciencia y ternura, trabaja día a día con un grupo de niños y adolescentes. Al
final queda claro que el hombre no sólo les transmite conocimientos a sus
pupilos, sino que también les inculca valores, demostrando ser alguien que es
capaz de expresar una enorme y sincera compenetración con cada uno de ellos.
6. Le scaphandre et le papillon (2007)
Otra coproducción
franco-americana. Jean-Dominique Bauby, un periodista francés, sufre un ACV que
lo deja parapléjico. Aún así no pierde su capacidad para comunicarse: puede
mover su ojo izquierdo. Pestañeo a pestañeo, escribe un libro, se reconcilia
con su familia, y muere habiéndole contado su historia al mundo. La película es
impactante, puesto que toma el punto de vista del protagonista y trata de
reproducir al mundo tal y cómo él lo percibió (sensitiva y emocionalmente) tras
haber sufrido el accidente.
5. Les choristes (2004)
Les choristes es una remake de La
cage aux rossignols, una película de 1945. La historia gira en torno acerca
de cómo algo que, a primera vista puede parecer insignificante, en realidad es
capaz de crear un cambio de mentalidad muy profundo en las personas: un maestro
llega a una escuela en donde todos los estudiantes son niños revoltosos e
indisciplinados, y gracias a la creación de un coro todos aprenderán a
valorarse a si mismos.
Un drama carcelario. La película
sigue el ascenso de un delincuente árabe que termina por devenir rey del
submundo criminal en el cual vive.
3. Entre les murs (2008)
François Bégaudeau es un escritor
que supo trabajar como profesor de literatura en una escuela secundaria de
París. A partir de esa experiencia escribió una novela, que luego se transformó
en película. El protagonista del filme, el profesor François Marin, está
encarnado por el propio Bégaudeau. La cámara recorre el recinto escolar, y
captura tanto los conflictos que se generan en las aulas multiétnicas, como los
esfuerzos de los docentes por tratar de superar la resistencia de los
estudiantes e inculcarles valores positivos y conocimientos verdaderos. Esta
obra también obtuvo la Palma
de Oro en el Festival de Cannes.
2. Rois et reine
(2004)
Dos personajes opuestos (un
hombre y una mujer que supieron ser pareja) se ven obligados a reconciliarse
para ayudar al hijo de ambos, un niño autista. Ella es una heroína trágica que
parece haber escapado de una obra de Ibsen, él, en cambio, bien podría
protagonizar una película de Mel Brooks. Más que un largometraje, Rois et reine parece una novela.
1. Le fabuleux destin d’Amélie Poulain (2001)
Una tímida mujer vive en un Montmarte
de fantasía, intentando ayudar a sus vecinos al mismo tiempo que apuesta a
superar su soledad. La película da a entender que la vida en París (o en
cualquier otra metrópolis) puede ser idílica si, simplemente, uno le aporta un
poco de magia a los eventos cotidianos. La influencia que ha tenido Amélie tanto dentro como fuera de
Francia ha sido enorme, afectando especialmente a los miembros de la generación
correspondiente.
1 comentarios:
Creo que las seis primeras son indiscutibles. De las demás yo dudaría en calificarlas de "esenciales".
Publicar un comentario